Habiba Djahnine en Okendo

La realizadora argelina Habiba Djahnine estuvo ayer en el centro cultural Okendo relatando el proceso de elaboración del documental 'Carta a mi hermana', film incluido dentro de la muestra de video 'Soft Fiction: relatos culturales sobre violencia, género y globalización' ideado por Virginia Villaplana junto a consonni y la sección de Igualdad del Ayto de Donosti.

'Carta a mi hermana' es un regreso diez años después a Tizi-Ouzou, ciudad en la que ocurrió el asesinato de su hermana Nabila, presidenta de la Asociación de defensa y promoción de los derechos de las mujeres 'Thighri N'tmettouth' (Grito de mujer). Regresa a través del documental para buscar la razón por la que la violencia y la masacre han sido las únicas respuestas a un conflicto que divide a los argelinos.

En primer lugar explicó el contexto social, económico y político de Argelia y enmarcó el asesinato de su hermana en el marco de las consecuencias del golpe de Estado en Argelia en 1992. Explicó el surgimiento, evolución y retroceso del movimiento feminista en Argelia y apuntó que hoy por hoy ya no existe. Hoy se dan lo que llaman 'movimiento femeninos', en Argelia no se entiende que el feminismo sea algo político.

Después habló sobre el proceso de la película, Habiba aprendió a hacer cine para realizar este documental. Regresó a los lugares donde había trabajado su hermana y descubrió que la gente había perdido la memoria y el contacto entre ellos. Habiba entiende que ese autismo es consecuencia del sufrimiento de toda una época y se da cuenta de que la violencia ha acabado con la intimidad de los individuos así que se propone sacar a la luz la vida propia de esas personas para dejar constancia de cómo la violencia ha destruído lo cotidiano.

Habiba Djahnine trabaja actualmente en Argelia impartiendo talleres de cine documental a jóvenes en cursos donde se elabora desde la idea a la distribución pasando por el guión y la puesta en escena. Habiba reconoce la importancia de estos talleres porque normalmente estamos acostumbrados a una única forma de relacionarnos con la pantalla de cine, por tanto, es primordial producir nuevas formas de narrativas que cambien las relaciones con la imagen, en definitiva, construir una nueva forma de existencia.

Imagen
Habiba Djahnine en Okendo
Proyecto