Un paseo por la Urbe:
Amanece un nuevo día y el teléfono móvil se apresura a sonar antes que el despertador lo haga. El gallo fue sacrificado hace ya tiempo.
Respondes a la primera llamada del día mientras te levantas de la cama como un zombi, desayunas, te duchas y te vistes. Ya estás listo para salir, ¡pero espera, te olvidas el i-pod!
Con los auriculares incrustados en las orejas, decides ir al trabajo caminando. Dicen que es bueno caminar, así que un paseo por la urbe no te vendrá mal.
Entre la música y la voz de tu compañero de trabajo al teléfono, no puedes más que dejarte llevar por el ritmo que las demás personas, que al igual que tú han decidido no coger hoy el coche, te marcan. Sólo vislumbras pelo, brazos, piernas, y algún que otro zapato, pues sin darte cuenta has entrado en lo más profundo de la marabunta y marcha inconsciente en la que te dejas llevar.
En un momento de lucidez coges dirección a la calle, por la que curiosamente siempre optas. Y transcurridos los 15 minutos habituales de la marcha por la ciudad de Bilbao, te encuentras sentado en el sillón de tu despacho, ante tu ordenador encendido con una innumerable lista de mensajes que no paran de llegar. Mientras tu secretaria te informa de las más de 5 llamadas urgentes que ha recibido antes de tu llegada.
Le comentas que hoy has venido caminando, pero ¿qué diferencia hay entre caminar por Bilbao o por Barcelona? ¿Dónde se han quedado hoy los edificios? ¿Las otras calles que no cruzan por tu despacho? En todas las ciudades hay i-pods, teléfonos móviles,….
Del mismo modo que las nuevas tecnologías y otras muchas distracciones no nos dejan disfrutar de las peculiaridades de nuestra ciudad, apelamos al filósofo situacionista francés Guy Debord y su dérive para extrapolar la reflexión a otro tipo de sonambulismo. Dérive es un concepto que designa a una marcha sin rumbo donde uno se deja llevar por los impulsos del momento. La mayoría de nuestras ciudades son desagradables porque ignoraban su impacto emocional en la gente y controlan el rumbo de sus habitantes a través de su diseño. Tratando de revisar la forma en que uno comprende los lugares urbanos y escapar de sus rutinas y sus rutas diarias, Debord utilizó la idea del dérive para instar a la gente a seguir sus emociones y mirar a las condiciones urbanas de una forma nueva.
Desde una adaptación muy particular de la idea de la deriva situacionista los artistas Iratxe Jaio y Klaas Van Gorkum proponen una marcha por lugares muy concretos de la ciudad de Barakaldo.
Se va a desarrollar un zombie walk por la ciudad de Barakaldo. El sábado, 14 de Junio, a medio camino entre la performance, el teatro de calle, la deriva, la acción espontánea o la grabación de una película de terror, Iratxe y Klaas propondrán una nueva forma de hacerse con la ciudad de Barakaldo.
