«El libro, en efecto, testimonia esos sentimientos, abraza las revoluciones por venir y, desde el comienzo, brinda "por los viejos maricas, que estuvieron allí y ayudaron a que esto ocurriese tan solo por haber estado allí". Ahora es el propio texto el que queda como testimonio de época, como marca de pasado que se actualiza para mirar el presente».
Enlace al artículo.